El sector lácteo apoya la idea de un observatorio para anticipar las crisis del sector.
El observatorio debe poder controlar los márgenes, facilitar información a nivel de productores y tener en consideración la diversidad del sector de la leche.
El sector lácteo europeo apoya la idea de la Comisión Europea (CE) de crear un observatorio para mejorar la transparencia en el sector y poder así anticipar situaciones de crisis, concluye un informe del Ejecutivo comunitario.
El documento pasa revista a las conclusiones de la conferencia celebrada en Bruselas el pasado septiembre para debatir el futuro del sector. «La conferencia subrayó, por amplio consenso, la necesidad de transparencia para que los cambios de tendencia se puedan identificar en una etapa preliminar y que las señales del mercado puedan llegar a todos los actores sin ningún tipo de demora», señala el texto. El observatorio, explica el informe, «debería poder controlar los márgenes, facilitar información a nivel de productores y tener en consideración la diversidad del sector de la leche».
Los expertos creen que ese instrumento, sumando a las posibilidades que prevé la reforma de la Política Agrícola Común (PAC), serán una ayuda para el sector más allá de 2015. Los participantes mencionaron, asimismo, otras ideas para regular los precios y los salarios, incluida la necesidad de reforzar las organizaciones de productores y la cadena alimentaria con normas más estrictas, o la posibilidad de un esquema voluntario u obligatorio que permita congelar la producción en tiempos de crisis.
El informe se transmitirá a los ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE) y a la Eurocámara antes de final de año. Cerca de 400 personas, entre productores, representantes de organizaciones y otros interesados, participaron en la conferencia de septiembre.
El comisario de Agricultura, Dacian Ciolos, planteó la idea del observatorio para recopilar datos a corto, medio y largo plazo que permitan conocer con precisión la evolución del mercado e informar a los productores para que puedan adaptarse a los cambios con mayor facilidad. La idea es que en el observatorio participen los Estados miembros y el sector, y que esté operativo antes del final del régimen de cuotas, en 2015.
Las ideas de la conferencia en Bruselas, junto con las conclusiones de otro informe que la CE presentará a mediados del próximo año sobre la situación del mercado de la leche, se tendrán en cuenta para determinar si hacen falta nuevas medidas legislativas en favor del sector o si bastará con adaptar los instrumentos ya existentes.